4 años

Olivia cumplió 4!




Fue hace un mes. Y no quise dejar de contarlo aunque las fechas no coincidan.
Es que el tiempo libre es muy poquito con una hija de 4 y uno de meses!Y ya que este blog es un espacio en el que queda registrado mucho de lo que considero relevante para nuestra vida como familia y para mi crecimiento personal, cuaderno de reflexión y álbum de fotos y momentos, el cumple de Oli no puede faltar.



En la carpita no cabía nadie mas!!!


Como cada año, a medida que se acerca la fecha, empiezo a soñar y planear. Amo festejárselo :)
Y me gusta hacer todo lo mas casero, personal y dedicado que me permitan las circunstancias. Este año la "circunstancia" tenía nombre y edad: Siro, seis meses.
Sentí como nunca antes, que ahora... tenía dos hijos!
Dicho así parece poco...2...pero en la practica...en mi practica durante esos días no me lo pareció.

Es que Olivia esperó este cumpleaños casi como a un hijo. Ja ja!!! lo esperó como 9 meses ;)
Cuando empezó a preguntar cuanto faltaba para su cumpleaños creo que le dije que faltaba que naciera Siro, que papi cumpliera años, después venia el de Lu, el de Pierina, el mio...tenían que terminar las clases, llegar el calor,las vacaciones y cuando estuvieran por empezar de nuevo las clases AHÍ IBA A SER SU CUMPLEAÑOS! POBRE! TERRIBLE MI EXPLICACIÓN!; bueno y esta espera, hizo que por esos días, casi un mes, estuviera tachando como preso el almanaque, y mostrara muchos nervios y ansiedad. Lloraba más que de costumbre por cualquier cosa, se la notaba sensible, y por la noche hablaba entre sueños.

Este año el cumple fue temático. Como no podía ser de otra manera, el tema se centró en los príncipes y las princesas.Ella los encuentra fascinantes.

Durante todo el año fui testigo de como mi niña empezó a disfrutar disfrazarse. Siempre con vestidos. A veces con coronas. Siempre maquillada. A veces hasta con uñas pintadas.
Se pasó el año bañada en perfumes :S untada con cremas. Se puso jabón en la cabeza y toda "peinadita" vino a mostrarme lo linda que estaba! Fue el año del talco en el cuerpo, en las zapatillas y en todo el piso de la habitación. El año del baño eternamente mojado, igual que su cabello, remeras y demás.
Ojo! también el año en que empezó a colaborar en casa con la limpieza: ayudando a lavar los platos, pasarle la esponjita con detergente a la mesa, "limpiando" vidrios... toda una cenicienta!
Este año, también tuvo su lugar relevante la televisión. hubo más dibujitos de los que me hubieran gustado, pero también miró películas. El seguir una historia, escuchar un relato largo, era algo que no hacía antes. Nunca antes de los tres años se sentó más de unos poquitos minutos delante de una pantalla. Pero ahora gusta mirar una película tantas veces que agota, y cada vez presta atención a detalles distintos que se suman a los anteriores, hasta que finalmente conoce párrafos de memoria e imita gestos y actitudes de personajes con tanta gracia que ...Me la como! ( me encanta cuando me muestra como baja en puntitas de pie, la cenicienta, las escaleras y... "zuum! pierde el zapatito!")
Así fue que para este día tan especial le regalamos un disfraz que ella eligió y avisamos a los chicos que vinieran con el suyo. Las niñas estaban encantadas, pero a los varones les costó un poco más. Mi amiga fue testigo silencioso de la conversación en la que mi hija y el suyo discutían sobre el asunto. Olivia le decía muy enojada a su amigo que si él no venía disfrazado de príncipe, y lo hacía de Hombre araña, ella no se casaría con él!



( y lo logró! acá está Valentín I de Gonnet, un bombón!)

El tiempo para realizar los preparativos se lo robé a las siestas de Siro y a mi descanso. Hice galletitas de avena, una torta de piononos apilados, muchas, muchas empanadas y pizzas caseras. Con Olivia como ayudante casi todo el tiempo, las armamos y freezamos. También hicimos trufas de avena, dulce de leche y chocolate. También colaboraron sus hermanas mayores haciendo galletitas con formitas y grana plateada arriba y una chocotorta que quedó para el otro día. La piñata, era de las que " no hacen PUM!", con caramelos, pulceras,que armamos juntas, también, añillos y pitos para hacer sonar.



Yo armé nuevas guirnaldas. De corazones. Pero usamos también esas caseras que hicimos con sus hermanas para el cumple de 2.
Las bolsitas del final las decoramos entre las 2. (Este año no pude hacer el souvenir).



Preparé coronas de papel, para que los invitados las decoraran. La consigna era venir sin corona, para hacerla acá. Una idea que resultó bárbara, ya que a todos les encantó, cuando en medio del cumple y antes de la torta, los invitamos a hacerlo. Se engancharon de tal forma, que hubo SILENCIO! ... y las coronas quedaron preciosas llenas de plasticolas de color, brillos de purpurinas y papelitos. Las cabezas de los chicos también!
Fué un cumple a la medida de mi hija. Con día soleado, amigos, pileta, juegos libre y mucho enchastre;)


Feliz cumple princesita de mi corazón!!!